Una parte importante
en mi vida es la música, me quita el stress, me pone alegre, me acompaña en los
momentos tristes. Creo que para cada momento por el que atravieso encuentro una
canción que me acompaña. En estos momentos que ando en Haití, mi canción es un
blues de BB King llamado “The thrill is
gone” (http://www.youtube.com/watch?v=4fk2prKnYnI)
Sin embargo, mucha de la música se ha hecho para bailar. Sobre todo cuando uno
va a un tono (de juerga, parranda o farra).
Desde muy pequeño
me gustó bailar de todo, en las reuniones familiares siempre terminaba bailando
con una tía o una prima. Es por ello, creo yo, que no entiendo una fiesta sin
bailar. No me considero un gran bailarín, bailo un poco de todo, pero sin
gran pericia, al menos no la que quisiera. Solo doy lo mejor de mí en cada
baile y trato de disfrutar y hacer disfrutar a mi pareja de baile de turno.
El momento cumbre
de mi amor por la música se dio cuando viajé a Cali, Colombia. Desde el 2007 hubo un género
que me comenzó a apasionar mucho, la salsa. Poco a poco fui escuchando grupos
de distintos lados y cada vez me gustaba más. Hasta que en el 2009 viaje a Cali,
la capital mundial de la salsa. Aluciné con la manera de cómo se baila salsa allá.
Es demasiado rico. A todos los salseros de corazón les recomiendo que alguna
vez en la vida vayan a Cali cuando esté de feria. Solo así entenderán porque le
dicen la sucursal del cielo.
El año pasado que
me seleccionaron para venir a Haití como voluntario, una de las primeras cosas que
investigué era qué cosa aprendería a bailar. No encontré mucha información
sobre Haití chérie. Las voluntarias con las que viviría me contaron que se
bailaba kompa, pero nunca encontré un video para ver cómo se bailaba. A
diferencia de República Dominicana, la hermana gemela de Haití chérie. La bachata
y el merengue estaban en mi mente desde ese momento.
Hoy, luego de 6
meses en la isla, puedo decir que podría bailar con las dos hermanas. Sin
embargo, Haití chérie tiene ese no sé qué que uno no puede explicar. Lo único
que puedo decir es que amo bailar kompa con ella. El kompa es un baile muy
sensual y exótico, como Haití misma. Lo que más me gusta es que ella no es
tímida, siempre baila pegadito y si uno se aleja o pierde el paso, te ayuda aproximándose
y se apodera de todo tu espacio personal. Uno termina poseído por la música ya
que Haití chérie te envuelve entre sus brazos, olores y cuerpo entero.
Bailando con Haití chérie |
El kompa que más me
gusta es Fe'm Kado'w de Carimi, la letra es machista ya que pone como objeto a la mujer,
eso no me agrada, pero el sonido y la forma como se baila es muy rico. Como
dije en mi entrada anterior, mi chica, Haití chérie, hace que la magia fluya (http://www.youtube.com/watch?v=iaCRz6d8fBM)
Continuará....
Continuará....
Carlitos... sigue bailando, sigue disfrutano de tu Haití Cherie - sabes que conmigo tienes una pareja incansable.... Sigue aprendiendo y llevando a mi lindo país en el corazón-..... Nos veremos pronto para ir a cabo haitiano....
ResponderEliminarSí, eso seguiré haciendo. Me encanta bailar... ya sea kompa, salsa, bachata o merengue. Todo es bien recibido... Sí, me encanta bailar contigo, pero andas un poco lejos como para hacerlo cada fin de semana.
ResponderEliminarUn abrazo enorme